Pero aquí estoy y quiero compartir con ustedes, una experiencia en el mundo de la moda que no puedo pasar inadvertida. Mi visita al Dubai Mall, considerado como el centro comercial más grande del mundo. Y si ya es grande, existen planes para hacerlo crecer aún más.
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| Toda una atracción esta cascada en el centro |
Pero este centro comercial no es el único. Existe toda una lista de varios de ellos. Nosotros hemos visitado otros dos. El Mall of the Emirates, el segundo más importante y el Wafi, engalanado con figuras egipcias, y claro, con pirámides.
Siendo Dubái una ciudad de emigrantes, el americano o el anglosajo, o cualquiera de nosotros que haya visitado los malls de los Estados Unidos, conoceremos inmediatamente las tiendas y restaurantes que acogen los centros comerciales de este emirato árabe. Y es que el visitante de Dubái puede sentirse en una ciudad americana, claro, la realidad árabe nos sitúa de nuevo para recordarnos que estamos en otro territorio cultural.
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| El Dubai Mall visto desde el mirador del Burj Khalifa |
En fin, estos centros comerciales, son casi como un espejismo en el desierto. Nos hacen pensar que estamos en otro mundo totalmente diferente al físico. Pero este espejismo termina, cuando dejamos de embobarnos con las ofertas comerciales, y nos ponemos a ver a nuestro alrededor.
Los centros comerciales en Dubái, han sido territorio de choques culturales. Al principio, los turistas y los expats, como se denominan los anglosajones en el extranjero, visitaban estos lugares casi en bikini, totalmente en moda playera. Y es que una cosa que el turista y extranjero occidental deben de entender, es la definición de moda en los Emiratos Arabes Unidos.
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| Mall of the Emirates, con decoración en el mes sagrado del Ramadán |
Al entrar a los centros comerciales, vemos en las puertas de vidrio, calcomanías explicando el código de vestir. Torso cubierto, comprendido con esto los brazos, torso hasta el nivel de las rodillas. Los niños son excepción, no hay reglas para ellos, ni para las niñas. Con el dibujo, se alude específicamente a las mujeres, quienes no deben ir en minifalda, ni con exagerados escotes, ni con los brazos al descubierto.
Pero esto no sucede. Se puede ver a visitantes en ropa sin manga y en shorts o minifalda. Siempre he leído en las guías turísticas, que los emirati, son un pueblo muy tolerante, y creo que es cierto, porque a nadie se les reclama, ni hay policías controlando. Se espera que el visitante aprenda para la siguiente visita.
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| No existe nada mejor, que visitar los centros comerciales para involucrarnos en la cultura de este emirato árabe |
En lo personal, ya aprendí a llevar suéters o saquitos, estilo bolero, evitando que se vean los brazos. Y claro, sin mostrar escote. No hay una obligación de llevar una chalina o rebozo, y ni siquiera llevar la cabeza cubierta. Pero lo que sí he notado en mis cuatro visitas a este emirato, es que las expats, siempre llevan uno, y me parece un muy buen gesto para los habitantes de este páis.
Cuando visité Abu Dhabi, uno de los siete emiratos, fui al Centro Comercial Marina, bonito, pero nada qué ver con los malls de Dubái, decidí vestirme toda de blanco: falda, blusa, rebozo rojo, pero error, creo que a los Emirati no les gusta que las mujeres usemos su color favorito. A las mujeres emirati les corresponde el negro. Ni hablar, de los errores se aprende.
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| At the Top, el mirador dentro del Dubai Mall para admirar el Burj Khalifa |
Claro que en los centros comerciales de Dubái ha habido provocaciones, por ejemplo, el caso de una turista inglesa que llegó al centro comercial en shorts y con el top de bikini. ¿Se pueden imaginar la situación de esta mujer, paseando en los pasillos entre los habitantes de Dubái? La mayoría de los hombres usan sus túnicas blancas, con velo en la cabeza. Mientras que las mujeres cubren todo su cuerpo con un hábito negro y en algunos casos, tapan su cara completamente.
Hay excepciones, y en Dubái, conviven familias con un cierto tipo de libertad de sus creencias religiosas. Vemos a mujeres sin su túnica negra y vestidas solamente con la chalina. Otras, con el turbante y pantalones. Pero yo les recomiendo que pasaran casi inadvertidas, si tapan sus hombros, cuidan su escote y de preferencia tapan sus rodillas. Así la visita a un país árabe es divertida para todos.
Los diseñadores de moda, un segmento para los árabes
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| Cavalli para niños |
El Wafi Centre, el Mall of the Emirates, y claro, el Dubai Mall, albercan marcas internacionales de diseñadores. Todos están representados. En el Wafi me impresionó ver las colecciones de Valentino, especialmente el diseño de sus bolsas rojas y rosa nude, con sus inolvidables rosas. En el Dubai Mall y en el Mall of Emirates, la moda de diseñadores va más allá y los pequeños de la casa, pueden vestirse prêt à porter, como sus mamis o papis. En estos dos centros, vemos a Dior for kids, a Channel, en fin, toda la gama de diseñadores para todos los gustos. Tengo todavía en mi memoria, el escaparate de Dior para niños. Una belleza los vestidos para niñas. Los abrigos, todo en color rosa nude. ¡Verdaderas obras de arte!
Nuestras hijas no recibieron de nosotros ninguna de estas prendas. De regalo les compramos ropa de Gap y a la chiquita, le regalamos un impermeable de Oilily. A la mayor, un vestido de Benetton. Estas dos últimas prendas a mitad de precio. Pero ellas se quedaron igual de contentas con sus obsequios como si hubieran sido de diseñador.
La novedad de este año para nosotros en el Dubai Mall, fue una sección exclusiva de zapatos de diseñador, llamada the Level. Nos dimos una vueltecita para ver sus exhibiciones, y bueno, ¿qué les puedo decir? ¡Estaban divinos!
La novedad de este año para nosotros en el Dubai Mall, fue una sección exclusiva de zapatos de diseñador, llamada the Level. Nos dimos una vueltecita para ver sus exhibiciones, y bueno, ¿qué les puedo decir? ¡Estaban divinos!
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| Level, dedicado únicamente para la venta de zapatos de diseñador |
Pero no sólo con moda se conforma el emirati
Exactamente, los centros comerciales en Dubái, son un escape al sofocante calor del desierto. Los malls, climatizados y envueltos de perfumes árabes, proporcionan tanto al emirati, como al visitante, un oasis de entretenimiento, un refugio al clima desértico. Desde los normales cines que todos conocemos, hasta atracciones más sofisticadas como el esquí. También existe un enorme acuario, en dónde el visitante puede ir a bucear con tiburones y mantarayas.
Exactamente, los centros comerciales en Dubái, son un escape al sofocante calor del desierto. Los malls, climatizados y envueltos de perfumes árabes, proporcionan tanto al emirati, como al visitante, un oasis de entretenimiento, un refugio al clima desértico. Desde los normales cines que todos conocemos, hasta atracciones más sofisticadas como el esquí. También existe un enorme acuario, en dónde el visitante puede ir a bucear con tiburones y mantarayas.
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| Mientras la mami se va a la tienda Esprit, los hijos se pueden quedar con el papi deleitándose en el acuario |
Todo centro comercial en Dubái, tiene sus áreas reservadas para rezar, divididas para hombres y mujeres. Durante nuestra visita se celebraba el Ramadán, el mes sagrado para los árabes. Este se lleva a cabo durante el noveno mes del calendario islámico. Es un tiempo de reflexión y en el cual se ayuna desde el amanecer, hasta el atardecer.
Durante este tiempo, en todos los centros comerciales no tienen venta de alimentos. Los restaurantes funcionan a partir de que el sol se oculta. El visitante y el emirati se da cuenta del tiempo, porque se pone una música especial.
Solamente en la cadena de panaderías Paul vendían mercancía para llevar. Pero su tienda tenía biombos que ocultaban a los clientes, a los vendedores y claro, por supuesto, a la comida.
En el Mall of the Emirates hay una tienda Carrefour. Al pasar por ahí, vimos que un policía regañó a un niño que comía un caramelo.
Otra circunstancia interesante que nos tocó ver, fue ver por los pasillos del Dubái Mall a dos mujeres que rezaban y llevaban un rosario como el católico. ¡Qué curioso!, pensé, rezando entre los escaparates del Dubai Mall. En fin, existen víctimas de la moda en todos lados. ¿No creen? Ni el Ramadán las detiene.
The souks
Los zocos, en español, son mercados dónde se pueden comprar desde especias, cigarros y todo tipo de mercancias. En el Dubai Mall existe un zoco de oro, dentro de sus tiendas. Hermosas joyas que pueden comprarse de acuerdo a su peso. Pero a diferencia de los zocos en el centro de Dubái, estas joyas son de una mejor calidad, en dónde probablente no se puede regatear.
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| En el Gold Souk. Dubai Mall |
También existen en este zoco, los carritos típicos que ofrecen joyas de fantasía. En un viaje anterior compré unas pulseras para mí, y otras dos para nuestras hijas. Como las árabes las usan. Les gusta usar mucha pedrería. Desde las bolsas, en las túnicas negras y hasta en los zapatos.
Para no perderse, o mapita o Ipad
El Dubai Mall es el centro comercial más grande del mundo, y por si esto fuera poco, planean agrandarlo. Definitivamente mi pasatiempo favorito en la alberca del hotel, cuando visitamos Dubái, es revisar el mapa con todas las tiendas, así no perdemos tiempo cuando vamos a visitarlo.
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| Con el Ipad se ahorra mucho tiempo en los centros comerciales de Dubái |
Esta vez, mi esposo bajó una aplicación para localizar las tiendas en el Dubai Mall. De verdad que la vida moderna nos facilita las compras. Con el Ipad conoces tu ubicación en el centro comercial y el camino que debes seguir para llegar a la tienda que estas buscando. Claro, que también se puede preguntar en el escritorio de información o a los guardias del centro.
Mis tesoros
Durante nuestra visita a los centros comerciales en Dubái, pudimos encontrar muchas ofertas. Mis tesoros en este viaje fueron dos pares de zapatos de la tienda Clarks. Unos botines negros, perfectos para el invierno suizo, y unas sandalias cafés. Todo a mitad de precio. De la tienda Nautica, una blusa con mis colores favoritos, azul y verde. Del Esprit. una chaqueta corta que adquirí por 50 francos suizos. En Suiza, me hubiera costado mínimo unos 200 francos. No pude evitarlo y volví a visitar una tienda de Desigual, que tenía su venta del cincuenta por ciento. En París ya había aprovechado las ofertas, y esta vez, en el Dubái Mall compré una blusa con colores ocres. Que según las guías turísticas, son los colores favoritos de las mujeres en Barcelona.
Desde mi primera visita a este centro, me hice admiradora de la tienda Monsoon. Esta vez, encontré un bonito vestido, con un elegante escote en el área del cuello-espalda. Del Gap encontré una playera con la leyenda de Dubái, y una sudadera marinera. Mis hijas encontraron sus tenis Sketchers para el deporte, y unos tipo sneakers la escuela, del H&M que en Suiza se acabaron como pan caliente, porque eran plateados.
Y de los placeres culinarios, les puedo decir, que siempre que vamos, nos damos la vuelta por el Entrecôte, Cafe de Paris, para probar una carne asada con la incomparable salsa inventada en Ginebra Suiza. También es una delicia para probar de nuevo los quequitos de la Magnolia Bakery, que hicieran popular las chicas de Sex in the City. Además, se pueden ver a los pasteleros mientras decoran los pasteles y otras delicias de la repostería.
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| Acceso del Dubai Mall para admirar la Dubai Fountain, otra atracción de este centro, al estilo las Vegas |
Esta vez no fuimos al restaurant Chili's, pero visitamos Uno Chicago Grill, para deleite de mi esposo.
En fin, los centros comerciales en Dubái, en especial durante el verano, hacen unas vacaciones inolvidables porque se adquieren unas súper ofertas, especialmente en la ropa que no es para el verano, como lo que compré. Y claro, también existen las típicas ofertas veraniegas en los artículos de esta estación.
Otra cosa que me gusta del shopping en Dubái, es que hasta mi esposo, se interesa en comprarse cosas para él. ¡Ya con esto estoy feliz!
Es un cliché, pero estos lugares hacen unas vacaciones felices. Además, es muy interesante ver cómo dos culturas tan diferentes conviven en armonía. Siempre recordaré las hermosas cabelleras que las mujeres árabes arreglan en los tocadores de damas. Melenas largas y sedosas, que vuelven a cubrir cuando regresan con sus familias al mall. ¡En fin, hay que respetar las otras culturas!
Mil gracias por leerme. Espero les haya gustado y hasta el próximo de la Moda lo que te acomoda o te enamora. Por lo pronto, me pondré a trabajar en el siguiente Aterrizando, con el tema de nuestra visita a Estambul. ¡Qué sigan disfrutando del bonito verano!
